El Castillo de Sagunto fue declarado Monumento Nacional en 1931.
Se considera romano porque esta civilización es la que más ha marcado al monumento, aunque dentro del castillo encontramos restos íberos, medievales y modernos, ya que, fue utilizada como fortaleza durante la Guerra de Independencia por las tropas francesas.
Las murallas tiene cerca de un kilómetro de longitud y se ubican sobre el cerro, rodeando toda la montaña. En su interior podemos contemplar una de las mejores colecciones epigráficas de toda la península ibérica, la cual recoge aspectos de la sociedad saguntina a lo largo de la historia.
El castillo se distribuye en siete plazas desde las que se observan vistas de la comarca y del mar Mediterráneo. En la plaza de Armas se encuentran las construcciones más antiguas como el foro o los restos de algunos edificios religiosos. También posee un piso subterráneo con calabozos y la puerta primitiva tenía un puente levadizo que atravesaba un foso.
Para más información pincha aquí.